martes, 29 de marzo de 2011

Fui al PyCamp 2011

Ya no soy geek.

Lo fui alguna vez: pasar de largo codificando alguna funcionalidad, aprendí lenguajes de programación raros, hice un programa que use inteligencia artificial para tareas triviales. Pero ya no hago esas cosas: trabajo en horarios de oficina, escribo muy poco código fuera del horario de trabajo, y en mi tiempo libre hago una materia de sociología en la facu. Sigo leyendo sobre tecnología y aprendiendo cosas nuevas, pero lo hago como cualquier persona que ama su profesión.

Por eso, cuando me preguntaron si quería ir al PyCamp, al principio lo dudé. Por un lado, porque me considero un newbie: usé Python el año pasado en el laburo y para algunos proyectos personales, pero soy consciente de lo poco que sé. Pensé también que ya no daba con el perfil, que no era tan grosso. Prejuicios.

Al final, dije que sí, de caradura. No tenía mucha idea de qué íbamos a hacer, salvo que tenía que ver con el lenguaje de la serpiente. Y sabía que no iba a conocer más que a una persona. Pero me convenció que se hiciese en La Falda, es una linda ciudad. :)

Lo primero que hicimos cuando llegamos, fue presentarnos todos. Ahí aclaré que no pertenecía a pyar y que nunca había entrado a la lista. Hubo risas, y a partir de ahí ya era uno más del montón. Después de las presentaciones, me entero a qué vine: habían 20 proyectos, me preguntaron en cuáles me interesaba colaborar, y después me dejaron a mi propia volición. Había un proyecto chiquito: era dar soporte de MySQL a un ORM (parecía accesible), y estaba metido Nassty, una de las dos únicas personas que conocía del evento. Sin más, me senté a codear. Bah, me senté a ver como los grossos seteaban el entorno de trabajo. Al final, me di maña para contribuir en la parte de SQL propias de MySQL, y sugerencias aquí y allá.

Como terminé temprano, me la pasé charlando con el resto de la gente y pasando el rato hasta la hora de la cena. Todos muy buena onda, y muy picantes. De hecho, alrededor de las 7, me puse a aprender a hacer malabares con unas clavas que había traido uno de los flacos :D . Fue un gesto alentador: si bien nos juntábamos a programar y hacer geek stuff, no significaba que era lo único que fuésemos a hacer.

El resto de los días transcurrió del mismo modo: contribuir a un proyecto de a ratos, y pasarla bien. Uno de los grossos del lugar nos dio un minicurso de Twisted, y programé un chat que te censuraba la lista de malas palabras de George Carlin, le siguió traducir con Ditto la documentación de Lalita al inglés (hice un 25% del laburo), después quise colaborar con i18n para la API de pilas, pero era super claro que no sabía de qué estaban hablando. En vez de eso, me puse con pyanola, donde, una vez más, mi carestía de conocimientos quedó en evidencia. Menos mal que San me tuvo mucha paciencia. :)

Dije que hicimos otras cosas aparte de programar. Para empezar, salímos a la zona de boliches (quedaba cerca :D ) con dos guasos, pero la mayoría de las mujeres de ahí tenían entre 16 y 18. ¡Así no se puede! Lo único que logramos fue llenar de olor a humo la remera de PyCon Atlanta. Otras cosas: curso de malabares y clavas, excursión al hotel Edén (con clases de física y química inolvidables), patear la avenida Edén (muy lindo lugar), torneito de metegol, torneito de Tron, y otros etcéteras.

Al final, fue un buen finde. Nueces, el que organizó todo, hizo un trabajo muy copado, hasta nos consiguió una Traffic que nos llevó ida y vuelta (los colectivos estaban de paro). Había un par como yo, que no eran picantes en Python, y a todos nos trataron como uno más de la comunidad. Quedé satisfecho con la gente de pyar, así que me terminé uniendo a la lista.

Así termina este road trip. FIN :P

2 comentarios:

  1. Muy buena crónica!
    Cuando menos uno sabe, mas uno aprende.
    :D
    Nos vemos en el prox. Pycamp.

    Elías

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  2. Grosso mateo, gracias por tomarte el laburo!

    Nos vemos en la lista! :)

    SAn

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